Rehabilitación Neuropsicológica basada en la evidencia

El pasado lunes acudí a una charla impartida por el neuropsicólogo Carlos Jaca. La charla titulada “Rehabilitación Neuropsicológica basada en la Evidencia” tuvo como principal objetivo enseñarnos el uso de metodologías neurorehabilitadoras con una base científica que las justifique.

A continuación compartiré una breve síntesis de dicha charla:

Al principio se destaca la importancia de realizar el seguimiento del paciente a la hora de realizar un estudio científico, ya que si solo realizamos la evaluación pre y post puede que solo obtengamos resultados debidos al entrenamiento. El follow-up es fundamental.

Además, muchos de los estudios no realizan una evaluación de la mejoría en la vida diaria. Por ejemplo, ¿de qué va a servir mejorar la capacidad de cálculo de un paciente si en su vida rara vez realiza ese tipo de cálculos?. Aparte de que una tarea realizada en el ordenador no puede trasladarse a la vida real. Sería más interesante en cambio, evaluar ejercicios ecológicos, poniendo como ejemplo la tarea de realizar la lista de la compra.

Carlos también destaca que es fundamental realizar estudios con un diseño de línea de base múltiple. Ello nos serviría si el tratamiento se ha de aplicar en la fase aguda, fase hiperaguda, etc. Si sabes que el tratamiento se pudiera aplicar a los 3 meses, nos podríamos centrar en rehabilitar otras funciones de mayor importancia antes.

Conocer el número de sesiones rehabilitadoras también es importante, ya que hay casos en los que una rehabilitación muy intensa puede ser perjudicial. El número ideal de sesiones por semana son de 2 a 3, pudiendo llegar hasta 5. Y cuanto más variadas y cortas sean las tareas a realizar por el paciente mejor, a parte de utilizar un aprendizaje sin errores (en inglés, errorless learning). También, si es posible se han de tener los gustos del paciente en cuenta, por ejemplo si le gustan las motos se podría utilizar un ejercicio utilizando una revista de motos. En conjunto todo esto ayudará a obtener una menor frustración y mayor motivación en el paciente, aparte de facilitar la generalización ya que se estaría utilizando elementos presentes en la vida diaria.

Por último, Carlos hace especial hincapié en realizar una correcta evaluación neuropsicológica, ya que, poniendo un ejemplo, de nada serviría empezar un tratamiento para mejorar la memoria si lo que se tiene es un problema de atención. Además, plantea la utilización de un modelo holístico integral, modelo en el que se tiene en cuenta al paciente, familia y equipo médico, teniendo como objetivo principal la reintegración al trabajo y psicosocial por parte del paciente.